En varias ocasiones hemos hablado de una serie de cuestiones que conforman la historia de Jódar.
Debéis buscar información sobre tres cuestiones:
Fundación del Castillo de Jódar.
El aceite de Jódar.
El trabajo del esparto.
De esta forma intentaremos bucear en nuestra historia
FUNDACIÓN DEL CASTILLO DE JÓDAR.
ResponderEliminar1266 años lleva el castillo de Jódar en la
historia documental, aunque probablemente sus orígenes sean mucho más antiguos; la arqueología documenta la presencia de civilizaciones preislámicas muy cerca de Jódar al ser paso de importantes vías de comunicación desde la antigüedad, por lo que no podemos descartar taxativamente un asentamiento en Jódar anterior a la ocupación musulmana, hecho que vuelven a avalar los estudios históricos actuales. Con esta obra se documentan algunas afirmaciones que se habían escrito sobre la fortaleza o la propia historia de Jódar, y caen algunos mitos y consideraciones sobre el castillo.
EL ACEITE DE JÓDAR.
ResponderEliminarEl Aceite de Oliva Virgen Extra producido en la Denominación de Origen "Sierra Mágina" es de una excepcional calidad, como resultado de la cadena que comienza en el olivo y termina cuando la botella llega al consumidor, identificada por una etiqueta con la que el Consejo Regulador garantiza el origen y la calidad del aceite, así como la Seguridad Alimentaria.
La ciudad de Jódar, cuenta con varias cooperativas y almazaras, que comercializan sus productos, en cuidados envases, y marcas propias, exportando sus aceites, de reconocido prestigio, hasta los más lejanos países. Jódar se encuentra incluída en la Ruta del Aceite de Oliva en Sierra Mágina, pudiendo visitarse sus almazaras, así como desgustar, en sus restaurantes, exquisitos platos regados con este oro líquido, que es el aceite de oliva.
Muy pronto, se cita en las crónicas árabes el desarrollo de la agricultura de Jódar, así Al-Himyari -que escribe entre los siglos XIII y XIV- en su obra "Kitab al-Rawd al-Mitar fi habar al.aqtar", menciona la alquería Sawdar denominada con el nombre de Gadir al-zayt (reserva de aceite) por la cantidad de aceite que en ella se elaboraba, siendo la primera productora de aceite de la Cora de Jaén, la misma crónica hace referencia a que Sawdar tenía muchas aguas corrientes y jardines, e incluso una aldea llamada "Uqdat al-zaytun" que significa Heredad de Olivos y que hoy, convertida en finca de olivares, sigue llamándose así.
En la actualidad Jódar cuenta con 6.531 Has. dedicadas al olivar, de las que 4.008 Has. son de regadío, gestionadas por varias Comunidades de Regantes, con modernas técnicas de regadío.
EL TRABAJO DEL ESPARTO.
ResponderEliminarEntre recolecciones la industria del pueblo era la del esparto. Por una escritura de transacción y deslinde ajustada en 1848 entre la entonces villa y el Marqués de Jódar, propietario de gran parte del término, quedó a favor de aquella, como aprovechamiento comunal, todo el esparto que se criase en sus heredades lo mismo que el yeso y la leña muerta para cocerlo. La operación de arrancarlo y llevárselo a la casa incumbe al padre, ayudado de los muchachos, si el padre ha muerto lo sustituye en este trabajo la viuda, también a veces va la mujer casada, cuando su marido salió a ganar jornal y se ha agotado la reserva de materia prima. Salen muy temprano, el que no tiene burro transporta los haces de esparto a la cabeza. De regreso los cuecen en latas de desecho del comercio de petróleo con lo cual la maceración, que en agua a la temperatura ordinaria, exigiría muchos días y un capital en balsas o depósitos, se verifica en poco rato. Hervido el esparto, lo solean, después lo majan con mazas de madera en piedras grandes de pedernal, colocadas al aire libre, en la calle o corral, y por la tarde lo elaboraban convirtiéndolo en liá, soga, quizneja, bozal, pleita para esteras, capachos para las fábricas de aceite, cavadoras, aguaderas, felpudos, esparteñas, obias o agobias, etc. En el mismo día venden la labor hecha a una “tratera”, sea a precio de dinero, o en especie, pues las trateras tienen tienda de comestibles. Entre las más conocidas trateras destacaba a finales del siglo XIX “La Piquita”, a veces éstas adelantan a las familias el pan del día por las mañanas, para cobrárselo en esparto labrado por la noche.
El esparto que las trateras van adquiriendo en esta forma, no lo venden para el consumo, sino que lo ceden a los almacenistas de la ciudad que han de portarlo.
La gran exportación de este textil a Inglaterra entre los años 1870 y 1880 llevó la abundancia a Jódar, llegando los vecinos a tener ganancias dobles, no digamos los exportadores, aquí comenzaron a surgir los grandes capitales de Jódar, cuando se descubrieron los grandes atochales de Argelia la industria se redujo, descendiendo los precios al nivel antiguo.